La Solana de Las Pilillas es un yacimiento arqueológico perteneciente a la cultura Ibérica. El lugar incluye una serie de construcciones para la producción de vino a gran escala y su posterior comercialización. Una auténtica bodega, la más antigua de Europa occidental de su clase, que marca el inicio de la Cultura del Vino en Tierra Bobal, hace más de 2.500 años.

Las Pilillas, son pilas excavadas en la roca (lagares o jaraices) donde se exprimía la uva, bien pisándola bien con prensas de madera y esparto, para obtener el mosto. Éste fermentaba en ánforas de cerámica guardadas en una bodega fortificada. El vino resultante era comercializado en todas las tierras de alrededor mediante una tupida red de caminos.

La bodega estuvo en funcionamiento 200 años (ss. VI a V a.C.) cuando el cultivo de la vid y la producción de vino se extendió por toda Tierra Bobal, adaptada la planta a los rigores de la comarca y transmitidos entre los íberos de la región los conocimientos sobre la elaboración de algo tan especial como es el vino.

La Solana de las Pilillas está incluida en la candidatura para Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO de “El Vino en Iberia”.