La fábrica de Harinas San Isidro Labrador está compuesta por un conjunto de edificios: almacenes, albergue de trabajadores y oficinas, zona de carga y descarga, edificio de molienda y un espacioso patio central que articula los espacios. La construcción fue diseñada y construida a finales de los años 20 del s. XX y estuvo en funcionamiento hasta 1982. Es un ejemplo de la industrialización del campo de Tierra Bobal y del inicio del cooperativismo en tierras camporruteñas. Destaca el buen estado de conservación de toda la maquinaria original, distribuida en tres pisos, a través de la que el grano era descascarillado, humedecido, molido y empaquetado.