Nuestro paisaje expresa cómo somos y en nuestro decálogo de marca decimos que “Somos como nuestra Tierra”:

 “Una tierra de intercambios, reservada a la vida y proveedora del vino que nos une a ella. Castellanos en Valencia. Acostumbrados a recibir gentes, a la dificultad de la montaña y a domesticar la tierra con las manos. A los inviernos valientes y al talante austero de quienes dependen de cómo está el cielo. Con un abrazo protegemos lo que tenemos y, con los mismos brazos, damos la bienvenida al forastero. Somos primarios, pegados a la tierra. De ella vivimos y por ella sacamos pecho. Somos como ella: con el orgullo alto y el carácter llano.”

Nuestro paisaje expresa nuestra relación con la naturaleza y es uno de los factores determinantes a la hora de definir los rasgos culturales de nuestra comunidad, por ello el paisaje es una parte muy especial de nuestro patrimonio natural, cultural y de nuestro carácter.

El paisaje es un elemento dinámico y cambiante que implica que la relación del hombre con la naturaleza es integral e inseparable. Nuestra naturaleza, vinculada y adaptada a los ritmos de las estaciones, agrícola y ganadera, integrada con la diversidad de recursos (económicos, humanos, biológicos) configura la forma en que afrontamos los retos y los cambios que producimos van a incidir directamente en la generación de paisajes más estables y en la sostenibilidad de los mismos, por ello nuestro compromiso con su conservación es clave para nosotros y es por ello que queremos compartir este compromiso con nuestros visitantes.

En nuestra Comarca Utiel-Requena el paisaje es un espejo de nuestra evolución a través de los siglos. La viña es un cultivo y actividad presente desde hace siglos (s VII a.C.) y la presencia del viñedo es seña de identidad del paisaje de Tierra Bobal, al que se han ido sumando los olivos y almendros salpicados de los campos de cereal.

Otro elemento muy relevante en nuestro paisaje es contar con la presencia de 25 espacios naturales protegidos, una reserva de vida que se extiende desde la Sierra Negrete hasta el río Cabriel, una llanura entre la montaña y el río.  Somos la mayor concentración de bosques de la Comunitat Valenciana, con antiquísimas montañas en un increíble paisaje de pinos, la impactante belleza de las gargantas del Parque Natural Hoces del Cabriel, una zona de altísimo valor ecológico, Reserva de la Biosfera y el Parque geológico del Parque Natural de Chera y Sot de Chera.

Pero Paisaje es también un espacio que integra elementos medioambientales de profundo carácter y simbolismo social en el mundo rural (espacios de reunión, socialización, trabajo, juego, festividades, alamedas, olmos y otros árboles en espacios públicos, especies de carácter simbólico como el roble, el tejo o la sabina, árboles monumentales y singulares dispersos por el territorio, dehesas, fuentes, etc.).

Todo ello conforma el Paisaje de Tierra Bobal, un paisaje que tenemos el deber de preservar para generaciones futuras y protegerlo de las amenazas que pueden degradarlo tales como la despoblación, la degradación de la relación entre las personas y la tierra o las formas de explotación no respetuosas con él, cómo macro-granjas, plantas de residuos, macro parques solares, etc.

Un paisaje protegido se convierte en fuente y medio de vida, da sentido y personalidad a un territorio y le proporciona orgullo y autoestima.  Porque un paisaje “cuidado” significa que la sociedad que vive en él se identifica con él. Las personas sienten que el paisaje forma parte de lo que son, de lo que hacen y de sus expectativas e ilusiones al futuro.

Tierra Bobal ha querido dar protagonismo a su paisaje como forma de expresar su identidad y lo ha hecho protagonista de su mensaje permanente de marca: donde el boque abraza al viñedo.  Un abrazo entre la naturaleza y el vino. Un mensaje que compromete a los habitantes y visitantes de ésta, nuestra Tierra Bobal.